Los vuelos a Santiago de Compostela nos traen excelentes precios para estos días. Quién no quisiera conocer este magnífico destino por menos de diez euros. Pues esto ahora es realidad para los turistas que parten de las ciudades de Madrid, Barcelona o Reus Salou. Sin embargo, si residimos o estamos de paso por otra ciudad del interior de España no debemos desanimarnos pues también podemos tener acceso a buenos precios para conocer Santiago de Compostela.
Por ejemplo, podemos conseguir billetes de avión por menos de 20 euros si es que pensamos partir de Málaga o por menos de 30 euros si lo hacemos desde Alicante, Sevilla o Valencia. En cuestión de minutos estaremos llegando al Aeropuerto de Lavacolla y pisando suelo santo según los fieles ya que se cree que el apóstol Santiago está enterrado en la ciudad. Esto ha convertido a Santiago de Compostela en uno de los centros de peregrinaje católico más importantes en el mundo conjuntamente con Jerusalén y Roma.
Esta historia la comprobamos asistiendo a la Catedral de Santiago de Compostela, uno de los símbolos de la ciudad y de las visitas más solicitadas de la ciudad. Asistiremos a un imponente monumento de fachada gótica en donde se cree está enterrado el apóstol. La fachada norte de la catedral se conoce como Fachada de la Azabachería y su construcción data del siglo XVIII. En el flanco opuesto encontramos la Fachada de Platerías en la que encontraremos una aportada románica, varios relieves y la torre del reloj sobre la izquierda.
Pero el centro histórico de Santiago de Compostela tiene mucho más por mostrar a sus invitados, no en vano fue declarado Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO hace un cuarto de siglo. La Plaza de Obradoiro que es la que contiene a la catedral también nos enseña el Palacio de Rajoy que originalmente fue sede del Ayuntamiento de la ciudad. A la derecha veremos el Colegio de San Jerónimo.
En esta misma plaza también se deja ver el Palacio de Gelmírez que data del siglo XII. Santiago de Compostela también tiene interesantes museos que debemos visitar. Hay que ir al Museo Gallego de Arte Contemporáneo y también al Museo del Pueblo Gallego que se encuentra dentro del Convento de Santo Domingo de Bonaval albergando magníficas y variadas colecciones.
Fotos
1 vista de santiago de compostela tomada de flickr por elchicogris
2 plaza de las platerias tomada de flickr por reservasdecoches
Juan
Habéis hecho una buena semblanza de Santiago de Compostela y aún así podríamos llenar páginas enteras sobre esta ciudad. Al atractivo de su historia o de su arte que desborda en cada fachada o en cada piedra de sus calles habría que añadir el dinamismo que aporta la universidad. El viajero no dejará de sorprenderse de encontrar plazas centenarias coronadas de jóvenes estudiantes, apuntes en mano, aprovechando el sol a media tarde. Santiago puede dar hoy, este año Xacobeo, la sensación de ser crisol de lenguas y punto de encuentro de culturas. El eco pausado de los zapatos sobre el granito monumental da una idea de atemporalidad absoluta. No hay prisa ni pausa. Un fluir de gentes de toda condición. Un peregrinaje de almas y sentimientos. Una vocación de trascender más allá de los años y de los días. Un ensimismamiento que se rompe, ¿cómo no?, cuando el aroma de las cocinas envuelve al caminante y lo devuelve a las necesidades mundanas. ¡Ah la gastronomía gallega! Tan lejos de Dios y tan cerca del colesterol. Es casi pecado. ¿Alguien ha venido por estas tierras que reniegue de nuestros manjares? El cocido en invierno, regado con un tinto mencía o una buena mariscada acompañada de un albariño son el primer paso para entrar en el cielo.
¿Cómo no iba yo a elogiar esta ciudad a la que tanto debo y tanto quiero? ¿Cómo no iba yo a recomendar al viajero que acuda, que venga, que disfrute de los placeres del espíritu sucumbiendo a las tentaciones del paladar? Es pecado venial. Es Santiago de Compostela.